Homenaje

se la tararea a sus vecinas del barrio,
bajito la remata por carcelera,
entran ganas de llorar.
En el sevillano, Palomo está,
recordando la saeta de años atrás,
Mateo y Roque Arroyo le dicen: "canta ya",
y sin pensarlo mucho, Palomo la cantará,
templándose por martinete en la puerta del bar.
Va echando chispas sus andares
es Paquito Obregón por la calle Real,
se encamina a la Plaza Alta dejando atrás el mar,
que ha oído los redobles y las cornetas de tocar,
cantará al Nazareno con aires de libertad.
Y si recordamos atrás, a finales de los 20,
con aquel trío de saeteras triunfal,
Anica, Bernardita Molina y Juana la de Ramón,
cantándole a Nuestro Padre Jesús y Señor,
saetillas gitanas que arañaba y dolían en el corazón.
Y en los tiempos que corren,
caminan dos destacadas en esta semana mayor,
Spínola y Calderón del barrio de San Isidro,
también son.
Propiedad del autor Manuel Flores Narváez
Copyright © 2005 SoNaKaY Flores
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio